lunes, abril 28, 2025

¿DE QUÉ POR CIENTO FUE EL APAGON, EUROPA?

"Cuba tendrá apagones simultáneos este domingo en hasta el 44 % de su territorio en el horario de la tarde-noche -el de mayor demanda de energía- principalmente por falta de combustible, según el parte diario de la empresa estatal Unión Eléctrica (UNE)", celebraba el pasado domingo la Empresa de Fakes Española (EFE), prolija en documentar la crisis energética cubana que impulsó el recrudecido bloqueo de Estados Unidos sobre la Isla, y docta en elucubrar cuánto del territorio nacional oscurece en el momento de menor respuesta de generación a la demanda de consumo. Pero todos tenemos tejado de vidrio...

El lunes EFE guardó pundonoroso silencio: a las 11:33 hrs toda España, Portugal, Andorra -100%- y, de manera parcial -30-40%- Francia, Italia y Alemania, quedaron en la oscuridad (aunque fuera el mediodía). Sistemas de comunicaciones, de transporte, trenes, aeropuertos, puertos, industrias, servicios, escuelas, hospitales, comercios, las redes informáticas y semafóricas dejaron de recibir servicio eléctrico. Hubo incluso reportes de afectaciones en el norte escandinavo. Para cubrirse las partes pudendas fue fácil apuntar primero al terrorismo y a los ciberataques -incluso rusos. Fue más doloroso admitir después que era un colapso global anunciado desde hacía semanas por los abultados niveles de generación mal administrada y de sobreconsumo que aquejan a esas sociedades. 

Sin bloqueo, sin subdesarrollo heredado, Europa recibió medicina de su otra crisis, la de soberbia. No hay manera que podamos alegrarnos con la desgracia ajena, menos con el apagón ajeno. Pero, mientras atiende sus propias necesidades y contradicciones, Europa podría ser más humilde y solidaria, y exigir a Estados Unidos que levante el bloqueo a Cuba, que deje entrar piezas para la central térmica francesa de Matanzas, que permita a la alemana Siemens y a la danesa Vestas instalar sus aerogeneradores en Cuba; que defienda a sus bancos para que puedan tramitar los pagos cubanos, y que exija a su aliado trasatlántico que deje de perseguir a los barcos que transportan petróleo hacia la isla. Y EFE debería ser el primer portavoz de esos reclamos, que atañen a derechos de todo un pueblo, y no a privilegios de pocos, y dejarse de tantas cuentecitas irritantes.

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