El huracán y la palma (Sindo Garay, 1926).
Silbaron los pinos, auxilio siniestroLos cedros tranquilos expresan dolor,
La Ceiba frondosa temblando sonríe,
La yerba en el llano,
Sumisa a morir.
Pero hay una palma
Que dios solamente,
Le dijo al cubano
Cultiva su honor.
Que erguida y valiente,
Con blanco capullo,
Que sirve de espada
Doblada hacia el suelo,
Besando la tierra
Batió al huracán
"Décimas" (en Páginas Vueltas, Nicolás Guillén, 1963)
En este camaronero
Máximo Gómez llamado,
hacia un pueblo desdichado
va el auxilio compañero
No importa el chubasco fiero
que altera y pica la mar, porque no
podrá apagar
de llevar rápido a Oriente
lo que allá pueda faltar».
cien barcos vienen y van:
el amor es capitán
y la vida timonel.
Aquí vio el propio Fidel
cómo se abre el corazón,
cómo es ancha la pasión
y serena la esperanza
de un pueblo cuya confianza
es más fuerte que un ciclón.
Adelante, compañeros,
que ningún ciclón nos mata
mientras vuele una fragata
y corran camaroneros.
Con campesinos y obreros
nuestra Patria se mantiene,
y si otra desgracia viene
la sabremos afrontar…
¡Patria o Muerte! A trabajar
¡Comandante en Jefe, ordene!
La semana más larga (Silvio Rodríguez, 2017)
La
semana más larga de una herida
entre
hordas humanas caminantes.
Intentando
cumplir con un instante,
dejando
en soledad toda una vida.
Viendo
cómo la fiera sacudida
de
un avatar de la naturaleza
agregaba
pobreza a la pobreza
en
los extremos de la sobrevida.
Asombroso recurso los aviones,
Asombroso recurso los aviones,
máquinas
de escupir diversidades
de
los confines y de las edades.
Un
botón de activarlo son canciones,
reflejos
de dudosas realidades
mientras
el mar se llena de ciclones.
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